Hace un par de semanas ponía la falta de miles de docentes como uno de los ejemplos de los callejones sin salida que aquejan al país y deben afrontar las autoridades del gobierno… ¿Qué hacer: llenar las vacantes con cualquiera, idóneo o no, para que los estudiantes tengan clases aunque no aprendan nada, porque de dónde iban a sacar miles de maestros mínimamente capaces de la noche a la mañana?
Ante la crisis, el Ministerio de Educación pateó la pelota hacia adelante, adelantando las vacaciones de invierno, para ver si podía encontrar en esos días de tregua algún paliativo; pero como era de esperar, porque los problemas no desaparecen mágicamente, siguen faltando miles de maestros para docenas de miles de escolares. Y este lunes comienzan las clases.
La explicación de que el desmedido número de jubilaciones que se produjeron este año es la causa de que falten tamaña cantidad de docentes, más que una excusa es en realidad un agravante y hace que la responsabilidad del hecho recaiga además de, por supuesto, en el ministro actual, también en sus antecesores.
Leer más aquí.
Observatorio Educativo Ciudadano no se hace responsable por los comentarios generados o publicados por lectores.
- Los usuarios que utilicen datos falsos en los registros de Observatorio Educativo Ciudadano serán bloqueados.
- Se anularán las cuentas de personas que utilizan este sitio para ofender, insultar, agraviar o publicar groserías. Los comentarios considerados inapropiados serán borrados.
- Los usuarios con más de tres reportes de abuso serán dados de baja.