Alumnos de la Escuela Básica 6971, de la Colonia Unión Agrícola, en Caazapá, desarrollan clases bajo los árboles debido a que sus aulas fueron clausuradas por el peligro de derrumbe. El MEC mandó carpas que se usaron en invierno, pero son imposibles de habitar con el intenso calor paraguayo.
3 DE MAYO, Caazapá (Antonio Caballero, corresponsal). El director de la institución escolar, Dionisio Correa, explicó que el problema se viene arrastrando desde el año pasado. Este 2019, para el inicio de clases, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) proveyó dos aulas móviles, que fueron utilizadas sin problema en los días de frío, pero que con las actuales altas temperaturas son imposibles de habitar para los estudiantes y los docentes. En esta situación, señaló el director, la única opción que tienen es utilizar la naturaleza como refugio. “Entonces estamos dando clases bajo los árboles”, puntualizó Correa.
El director detalló que son tres los cursos que no tienen salón, ya que el bloque viejo de la escuela corre riesgo de derrumbe. “Por seguridad de los alumnos hemos decidido abandonar los salones”, alegó el docente.
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